Sanando Tu Espiritu – Serie # 9 de 9 – Antojitos Espirituales

Hoy estaremos presentando el antojito de la “Templanza (Dominio Propio)”. Es un antojito al que debemos poner mucha atención, ya que forma parte de nuestro desarrollo diario y proyecta nuestras emociones y nuestro carácter.

Cuando analizo la palabra templanza, me lleva rápidamente a pensar en mi temperamento. Me hace pensar que de alguna forma, atraves de el dominio propio; ejercemos poder y fuerza. La templanza nos da la capacidad de poder controlarnos y permitir que la paz llene nuestro interior. Cuando perdemos la templanza terminamos descontrolados y nos causamos daño y causamos daño a otros. Tomar buen control de la templanza; coloca nuestras acciones y emociones en una balanza.

Mientras preparaba estos “antojitos”, durante toda esta larga trayectoria, me preguntaba, como sería el desarrollo de este tema, ya que al comienzo de los temas anteriores, me consideraba una persona algo impulsiva y casi siempre se me ocurría interrumpir a las personas cuando hablaban para ofrecer mi opinión, sin esperar tranquilamente que terminaran de hablar. No suena muy bonito, pero es una realidad. Ciertamente que no con mala intención, ni queriendo saber más que nadie, sino que deseaba dejar salir el pensamiento, a lo mejor para que no se me olvidara lo que deseaba comentar, o simplemente porque deseaba compartir mi opinión con las personas. Puedo decir que era un acto impulsivo e innecesario, pero sin duda alguna; inaceptable. A lo mejor te ha pasado como a mi y sinceramente no es intencionalmente, simplemente sucede. Si esto no te ha ocurrido, te felicito, porque no es muy agradable actuar así.

Las críticas de mi familia y de personas que silenciosamente lo hicieron; me llevaron a pensar que de alguna forma, tenían razón y que es necesario poner atención y buscar el remedio. Jamas imaginé que lo iba a encontrar con mis propios mensajes. “Así que estoy tomando de mi propio chocolate”. Cuando esto sucede, es mejor reconocer nuestros errores de una forma tranquila y transparente, evitando el enojo y sin tratar de justificar lo que hacemos mal. Estos antojitos han sido preparados para una sanidad espiritual. En ninguna manera son para acusar a nadie, ni ofender a nadie. Espero que juntos hayamos alcanzado de una manera especial de tratar de desintoxicarnos de tantas cosas que han contaminado nuestras almas.

En la palabra De Dios encontramos un versículo muy conocido en 2 Timoteo 1:7 – Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. Un texto bíblico que todos mencionamos constantemente.

La palabra De Dios es maravillosa y me llama mucho la atención este versículo, porque de alguna forma Dios desea que nosotros tengamos poder, que nos llenemos de mucho amor y que por ende nos arropemos de dominio propio. “Aprender a controlar nuestras acciones y emociones; aleja la cobardía que produce la desobediencia de no poder dominar nuestro carácter”. Es nuestra responsabilidad controlar y dominar nuestras emociones y nuestro carácter.

El hecho de ignorar la verdad de la templanza, nos arrastra a un desenfreno de nuestras emociones que puede llevarnos a acciones innecesarias y en contra de la palabra De Dios . Por ejemplo, personalmente como dije anteriormente una de mis luchas personales ha sido poder controlar el hecho de interrumpir a otras personas cuando estaban hablando. ¡Increíble ! El hecho de poder libremente reconocer que tengo que trabajar arduamente en esta área; me ayuda a tratar de enfrentar este mal y vencerlo con la ayuda De Dios. Solamente con la ayuda del Espiritu Santo podemos enfrentar y solucionar la verdad de el poder de el dominio propio,

Encontramos otro mal que emocionalmente nos está afectando grandemente y es el desenfreno de lo que comemos. Pienso que la situación de la pandemia, por la que todos estamos atravesando globalmente, ha causado de alguna forma, el comer mas y desenfrenadamente. El hecho de que tenemos que estar encerrados o que estamos limitados a socializar y a viajar, ha formado diversidad de pensamientos que han afectado mentalmente nuestro diario vivir. En algunas personas que están enfrentando alguna condición física, este desenfreno puede afectar grandemente la función correcta de su cuerpo, por lo que también es necesario aplicar la templanza a nuestras vidas. Es muy importante tratar de vencer este desenfreno para alcanzar una mejor salud física.

También la falta de templanza puede producir violencia hacia otras personas. La falta de templanza también produce diferentes desenfrenos que llevan al pecado y a la desobediencia.

Dios nos mostró su gran amor atraves de su hijo Jesucristo. Jesus ha sido nuestro gran modelo y ejemplo de como conducirnos usando como alimento espiritual; estos frutos. Su amor, su gozo, su paz, su paciencia, su benignidad, su bondad, su fe, su mansedumbre, y su templanza, formaron parte de su ministerio en su trayectoria terrenal, mostrando con hechos los grandes resultados de su ministerio. Es urgente que tratemos de consumir estos frutos diariamente; para que como Jesucristo, podamos ser de bendición a tantas personas que lo necesitan.

Cuando nosotros consumimos diariamente nuestros alimentos, necesitamos un buen sistema digestivo para poder procesar estos alimentos, creo que todos estamos de acuerdo en esto. En nuestra vida espiritual necesitamos entender la importancia de que solos, no podremos alcanzar los resultados que necesitamos, pero Dios ha puesto hombres y mujeres ungidos para nuestra bendición. Dios ha puesto un gran tesoro en nuestras manos para que podamos consumir estos alimentos que necesitamos para continuar saludablemente esta jornada.

Es necesario entender que las personas todos somos instrumentos en las manos De Dios para hacer la voluntad De Dios y para cumplir la Palabra De Dios, sirviendo a otros. La clave de el éxito en tu vida espiritual es entender: ¿Quién es Jesus?, ¿Cuál fue su propósito de su sacrificio en la cruz por ti y por mi?. Entender que Jesus dió su vida por ti y por mí en la cruz para perdón de nuestros pecados y entender todo el legado y herencia, que nos dejó en La Palabra De Dios y que trae un alivio espiritual que permite que estos frutos sean sembrados profundamente y con grandes raíces en nuestro interior.

Luego que entendemos esto, a lo mejor te preguntas: ¿Si pero murió y no está aquí?. ¡Magnifica pregunta! Qué bueno que preguntaste. La Biblia dice en Juan 16:7 – Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré. Hermosa y apasionante Palabra De Dios. Esto significa, primero que Jesus no está muerto y segundo que te ama tanto desea que sepas que no estas solo (a) y mucho menos ahora, pues tenemos al consolador que Jesus nos envió.

¿Quién es el consolador? El consolador es el Espíritu Santo, que vive dentro de ti y de mí. Él nos consuela, nos cuida, nos recuerda y nos guía para que podamos poner todos estos frutos en acción para bendición espiritual en nuestras vidas. 1 Corintios 6:19-20 nos deja saber claramente esta preciosa verdad. ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espiritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis De Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son De Dios. ¡Maravillosa verdad!

La Biblia es el Pan de Vida que fortalece y alimenta nuestro espíritu. La mejor decision que debemos tomar en estos momentos críticos y finales es el “Alimentarnos” diariamente con este pan y esta agua que Dios nos provee.

Juan 6:35 – Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.

Palabras muy poderosas que Dios ha puesto en nuestras manos. Está en nosotros si la tomamos o la desechamos.

OREMOS

• Padre yo te alabo y te bendigo en esta hora.
• Te doy gracias por tu amor y misericordia para con migo y por tu sacrificio en la cruz que trajo salvación y redención a mi vida.
• Te doy gracias por la bendición de tu regalo tan grande “El Espiritu Santo” que habita en mi.
• Perdona mis ofensas y trasgreciones en tu contra y en contra de los demás.
• Ayúdame a controlar mis emociones y todo lo que esté en contra de tu voluntad.
• Ayúdame a ser imitador (a) tuyo y que pueda siempre alimentarme de tu Palabra.
• Te doy gracias por tanto amor para conmigo.
• Permite que pueda yo aplicar y consumir todos estos frutos diariamente y compartirlos con los demas.
• En El nombre de Jesus

AMEN

¡MUCHISIMAS BENDICIONES!